Qué es el batch cooking y cómo puede ayudarte en tu día a día

Comer saludable, rico y ahorrando tiempo y dinero. Ese es el verdadero secreto del batch cooking del que tanto se habla últimamente. Hoy te hablamos de sus beneficios y de cómo hacerlo en tu casa, de forma sencilla.

Seguro que si piensas en una cocina rica, te viene la de tu abuela, abuelo o la de tu madre o padre a la mente. ¿Me equivoco? Sí, hay que reconocer que como cocinan nuestros mayores no lo hace nadie. Y como la paciencia que tienen ellos en la cocina, tampoco. Porque para cocinar bien y rico, hace falta tiempo, ¿verdad? Pues no. La realidad es que no y el batch cooking ha venido a demostrarte que te puedes cuidar, puedes comer rico y, sobre todo, saludable y variado, sin necesidad de tener que pasarte todo el día cocinando o pensando en qué vas a preparar porque llega la hora de la comida.
En Verleal nos gusta cuidarte y que puedas comer bien. Por ello, nosotros ponemos parte de lo que necesitas (ya sabes, nuestras ricas verduras congeladas) y te explicamos cómo hacer el resto. Ya verás que es casi tan fácil como disfrutar de nuestros prácticos Esenciales y Ayudas culinarias para que puedas tener preparados deliciosos platos en tiempo récord. ¿Te animas a descubrir cómo?

¿Qué es el batch cooking?

Si antes hablábamos de la cocina de las abuelas, la realidad es que el batch cooking es como la versión 3.0 de lo que ellas hacían. Cocina saludable, pero adaptada a nuestra época y a nuestra realidad: estamos todo el día fuera de casa y no tenemos mucho tiempo para dedicarle a las tareas del hogar; entre ellas, cocinar a diario.

En definitiva: el batch cooking es cocinar en un solo día la base esencial de los platos que vamos a tomar durante las comidas y cenas del resto de la semana. Y te preguntarás, ¿qué es eso de la base esencial de los platos? Pues todo aquello que se puede preparar de antemano y se puede conservar, para que solo tengas que calentarlo y listo, conservando todo su sabor.
El cómo lo hagas y la cantidad de comida que prepares va a depender un poco de tus necesidades. Por ejemplo, hay quien solo prepara la base de las comidas para consumirlas de lunes a viernes y hay quien lo hace solo para las comidas y deja más espacio a la improvisación para las cenas.

Beneficios de practicar el batch cooking

Como ya te hemos adelantado al principio, uno de los principales beneficios del batch cooking es que puedas comer saludable durante toda la semana, sin necesidad de tener que pasarte horas en la cocina. 

¿Cómo se consigue esto? Planificando. Las primeras veces cuesta algo más, pero cuando lo haces dos o tres veces, todo resulta mucho más sencillo. Sin embargo, no es este el único beneficio; también te aporta los siguientes: 

• Ahorras dinero. Y lo haces por dos motivos: el primero es que al cocinar en un solo día para varios, puedes aprovechar mejor el tiempo que utilizas tu cocina o el horno. El segundo está relacionado con la cesta de la compra: al tener bien definido qué vas a comer, no gastas de más en comida. 
• Reduces desperdicio alimentario. Como consecuencia de lo que te acabo de contar. Cuando vas a hacer la compra teniendo bien claro qué es lo que vas a comer entre semana, preparas mejor las cantidades y compras lo que necesitas, sin necesidad de comprar en exceso y que luego se pueda poner malo o se caduque. 
• Ahorras tiempo. Porque la mayor parte de lo que vas a comer el resto de la semana lo preparas en un día. Por lo general, tardas unas dos horas en preparar las comidas y cenas, de lunes a viernes, para dos o tres personas. Lo que tengas que hacer en el momento o lo que tardes en calentar lo que has preparado con antelación, nada tiene que ver con el tiempo que tardarías en prepararlo en el momento. Además, vas menos a hacer la compra, porque necesitas hacer una compra grande, para asegurarte que puedas preparar todas las comidas. 
• Es más fácil mantener tu peso. Al comer saludable, que es el primer beneficio que hemos destacado, también evitas el picoteo o malcomer porque no te da tiempo a preparar la comida del día a día. 

Para la consecución de estos 4 objetivos nuestras verduras congeladas pueden ser tus grandes aliadas, pues han sido recolectadas en su punto óptimo de maduración para conseguir que lleguen a tu hogar con su máxima frescura. Además, el formato congelado de nuestras verduras te permitirá utilizar la cantidad exacta de los ingredientes que necesites y congelar el sobrante, para que no tengas que tirar nada a la basura. 

Cómo empezar con el batch cooking

Al principio puede resultar abrumador pensar que vas a cocinar para tantos días, pero créenos: te va a encantar en cuanto sepas cómo hacerlo. 

Antes de ponerte a preparar la comida es importante que: 

• Dispongas del material necesario para hacerlo: recipientes (de cristal a ser posible o que aguanten bien tanto la temperatura del frigorífico como del congelador) para poder conservar los productos que vas a cocinar y que sean de diferentes tamaños y alturas.
• Dispongas de sitio: tanto en la nevera como en el congelador, porque es cierto que los recipientes ocupan más espacio que la propia comida (aunque algunas verduras y hortalizas pueden ocupar mucho espacio).

Si estos pasos ya los tienes controlados, pasa al siguiente paso: pensar qué vas a comer el resto de la semana, cuántos sois y si solo vas a preparar la comidas o también las cenas. 

En este sentido, ten en cuenta que para que comas saludable, variado y equilibrado, es importante que todas tus comidas respondan a la distribución del famoso Plato de Harvard: la mitad del plato verduras y hortalizas; un cuarto de legumbres y cereales (si son integrales, mejor que mejor) y el otro cuarto, proteínas.

¿Te has fijado que en la primera parte del plato puedes ahorrar todavía más tiempo? Sí, has acertado: puedes ponerte a cocer y asar verduras y legumbres para dejarlas preparadas o hacerte con algunos de nuestros congelados naturales o bio y preparar la cantidad que necesitas en menos de 10 minutos. ¿Qué haces mientras tanto? Preparar o calentar la parte de la proteína y de los cereales.

De esta manera, te aseguras de que siempre tienes verduras riquísimas y a mano, sin necesidad de tener que comer mal o de pasarte el día en la cocina. 

¡Inspírate con nuestras recetas!

Arenques nórdicos con pimientos asados

4 personas

Fácil

25 min.

Espárragos con huevo poché y jamón serrano

4 personas

Fácil

15 min.

Gratén de judías verdes con tomate

2 personas

Fácil

25 min.

Ejemplos para iniciarte en el batch cooking

• Asar verduras, cocerlas para hacer purés con ellas o utilizar nuestras verduras congeladas, es la mejor manera de asegurarte tu ingesta de verduras diaria. Por lo demás, puedes dejar preparada la parte de los cereales, por ejemplo, dejando cocida pasta, arroz, quinoa o cuscús (piensa que irá como acompañamiento). 

• También puedes dejar patatas cocidas (mejor con la piel) o huevos, de manera que se lo puedas añadir a un puré o un gazpacho bien fresquito, entre otros ejemplos. 

• Por supuesto, no tengas miedo de echar mano de conservas naturales, tanto de legumbres como de pescados azules, por ejemplo, que te facilitarán esta tarea y seguirás comiendo a las mil maravillas y de manera saludable. 

• Lo que sí que te recomendamos es que si van a estar más de 3 o 4 días en la nevera, lo dividas en raciones, de manera que si no vas a comerlo un día, lo puedas meter al congelador o si has hecho de más, lo puedas guardar para otras semanas.

• Y, por último: no te olvides de etiquetar cada envase, así como la fecha de cocinado, en caso de que lo vayas a meter al congelador. 

Como puedes ver, comer saludable, ahorrando tiempo y dinero es posible. ¿A qué esperas para empezar?

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